Nayeon sólo podía sentir calidez con la que pocas veces se despierta, abriendo sus párpados mientras sentía un peso encima de ella, su pecho con un poco de sudor por la caliente respiración que chocaba con el. Mina solo dejaba besos en su cuello, castos e inocentes besos esperando a que la coreana despierte y la abrace como 'Buenos días', y eso fue exactamente lo que la coreana hizo.

La coreana levantó una pierna para dejarla apoyaba en la cadera de la japonésa y rodeó la espalda de ella, atrayendola hacía su pecho. Después de un apretado abrazo decidió llevar sus manos al abdomen de la japonésa y acariciarlo llevándose un par de risas.

- Me haces cosquillas, Yeonnie - Nayeon sólo siguió con su acto mientras aplicaba más presión en las costillas haciendo que las sabanas se removieran por el movimiento de Mina retorciéndose mientras carcajeaba.

- Ese es el punto, Minari - unos minutos después de pura risa, Mina pudo tomar el control de las manos de su novia y se colocó arriba de ella mientras intentaba que no se le escapase. Nayeon sólo reía y se removía para poder liberar sus manos que estaban una a cada lado de su cabeza en posesión de las manos de Mina.

- ¡Gane! - exclamó alegre la japonésa con una sonrisa. Pero con un esfuerzo Nayeon pudo voltear las cosas, quedando ella arriba de Mina, con las piernas flexionadas sentándose en la cadera de la menor y inmovilizandola de las manos - ¡Yeonnie! - se quejó la menor, intentando soltarse. La coreana le sonrió y, importandole poco el aliento matutino, la besó lo cual Mina correspondió con gusto.

- ¡Ahora yo gane! - exclamó de la misma forma la coreana manteniendo firmes sus extremidades para que Mina no escapará - ¿El premio? - preguntó alzando una ceja, haciendo reír a Mina la cual se zafó las manos y se inclinó al oído de la coreana.

- Bañarnos juntas - susurró notando como la mayor se quedaba paralizada. Rió y continuó - Para ir a una cita antes de que vengan mis padres - a eso la coreana miró hacia la ventana notando el sol ya en todo su esplendor.

- Espera... ¿No tendrían que haber llegado ya? - se alarmó pero al ver como Mina negó pudo calmarse.

- Me desperté hace un rato, tenía mensajes de que atrasaron el viaje porque mis demás familiares los invitaron a una cena que no pudieron negarse - explicó la japonesa - Vendran hoy en la noche, no quieren que pase otra noche "sola" - dijo un poco divertida pero la coreana captó una leve tristeza. Nayeon fácilmente podía leer a Mina, esta estaba triste por tener que ocultarle algo así a sus padres, que estos no sepan de la persona muy importante y que ama - Y-Yo creo que les diré - Nayeon la miró sorprendida pero luego sonrió.

- ¿Estás segura? - no es que no quisiera que se sepa su noviazgo, era que temía que la señora Myoui prohibiera algo como una relación a Mina. Mina asintió.

- Quiero poder salir y besarte con libertad sin preocuparme a que llegue a oídos de mi madre por otras personas. Quiero decir que saldré contigo sin soltar una mentira de que eres mi amiga - eso hasta a Nayeon le dolía de solo pensar ser solo amiga de Mina - Quiero que cenemos mientras mamá te intimida con preguntas - Nayeon tragó saliva y Mina solo pudo reír por la expresión de la coreana - No dejaré que te dé un ataque de pánico - tranquilizó besando la mejilla de la mayor mientras esta inclinaba todo su cuerpo para recargarlo contra el de la japonesa.

- Yo también quiero todo eso, Minari. Besarte sin preocupación a nada, que tus padres me consideren tu novia, que no tengamos que vernos a escondidas de ellos - se acurrucó en los brazos de la japonesa mientras le acariciaba delicadamente el cabello - Quiero que me intimide y yo tenga que hacerme la fuerte porque en realidad me da un montón de miedo - la menor soltó una carcajada y la coreana se dió la libertad de sólo sonreír mientras dejaba que ese hermoso sonido inundará sus oídos.

- Vamos a bañarnos. ¿Quieres salir a comer o pedimos algo? - preguntó mientras se levantaba.

- Lo que usted quiera, mi reina - dijo en un tono divertido mientras seguía a Mina en dirección al baño. No pudo evitar sonrojarse cuando la menor apartaba la ropa de su cuerpo con tanta facilidad.

Nayeon se permitió mirar el cuerpo desnudo por un largo tiempo sin notar que Mina la miraba esperándola. La coreana llevó su mirada a el rostro de la menor sólo para ver que este gritaba '¿Terminaste o me quedo quieta más tiempo?'. La mayor agachó la mirada sintiendo su rostro ardiendo mientras escuchaba unas pequeñas pisadas y luego un beso en su frente. Mina se las había arreglado para pararse de puntituas y dejar un beso en esa zona.

- Vamos, Yeonnie - la coreana levantó la mirada para ver como Mina le sonreía. Nayeon rápidamente se apartó de su ropa al ver que la japonesa ya había comenzado a meterse en la ducha dejando que muchísimas gotas cayeran en su cuerpo.

Unos minutos pasaron mientras se escuchaban risas de adentro, con Mina todavía burlándose del miedo de la mayor y la mayor defendiéndose con cosquillas que hacían más efecto al no tener ninguna prenda que les estorbe para hacer contacto directo piel contra piel.

La primera en salir fue Nayeon, la cual no quería ponerse su ropa ya sucia, no estaba del todo sucia pero igual ya se la había puesto. Mina al notar eso, la dejo que libremente escogiera lo que quiera de su armario y la coreana felizmente fue a ver lo que contenía el armario con una toalla a su alrededor, todavía no se iba la vergüenza de que Mina mire su cuerpo.

Mina salió ya vestida, ya que cuando se levantó temprano había dejado la ropa en el baño para cuando se levantase, por lo que pudo cambiarse en el baño siendo consciente que su novia todavía no se acostumbraba a la desnudez de nadie, ni de sí misma ni de su novia.

- ¿Quieres ir a algún lugar en especial, Yeonnie? - Nayeon negó, mientras la blusa color azul ya caía por su abdomen tapando su piel.

- Podemos pedir algo o solo caminar por ahí, lo que tú quieras, Minari - la mayor se apegó a la espalda de Mina sólo abrazandola.

Porque a donde quiera que vayan, si Mina estaba con ella, estaría muy bien para ella.